martes, 20 de octubre de 2009

El museo de Tokyo como padre biológico



Para profundizar en la obra de Pablo Pintado Riba es necesario conocer el marco histórico en el que nos encontramos. Hablar de Pablo Pintado Riba es hablar de la arquitectura de la posguerra española, hablar de la corriente Racionalista y de el Movimiento Moderno, hablar de grandes maestros de reconocimiento internacional como Le Corbusier, Alvar Aalto, L. Mies van der Rohe, de Walter Gropius y de la Bauhaus.

En el panorama nacional encontramos la asociación GATEPAC.

Pablo Pintado Riba, se consideró discípulo de Jose Luis Sert, una de las figuras mas destacadas de la segunda generación contemporánea de arquitectos. Jose Luis Sert mantuvo una larga relación profesional con Le Corbusier, vinculándose así a una arquitectura mas a nuestro tiempo.

Debido a esta conexión Sert-Le Corbusier, el origen de la obra de Pablo Pintado Riba se asienta en este contexto de racionalista. Esta arquitectura racionalista se caracteriza por la desornamentación decorativa, la sinceridad de los materiales, y los volúmenes de geometría perfecta, cubos y prismas cuadrangulares. El racionalismo no pretende limitarse a construir edificios; es toda una nueva concepción de la ciudad como centro urbano, mercado y lugar de habitación.

Por esta razón, entiendo que el padre biológico del Palacio de Congresos de Madrid (única obra relevante de Pablo Pintado Riba) está en la obra de Le Corbusier. Si queremos poner nombres y apellidos, estamos ante el museo de Tokio, donde encontramos las cualidades fenotípicas del proyecto de Pablo Pintado Riba.

- Esqueleto estructural del edificio en lugar de simetría axial
- Predilección por las formas geométricas simples, con criterios ortogonales
- Empleo del color y del detalle constructivo en lugar de la decoración sobrepuesta
- Concepción dinámica del espacio arquitectónico
- El uso limitado de materiales como el acero, el hormigón o el vidrio (nuevos materiales)


El proyecto de Pintado Riba ganó el concurso frente a otras obras de grandes arquitectos por la simplicidad y corrección en la distribución de sus tres volúmenes




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